El padre del muchacho los espero en la central, donde recibió a su hijo con un gran abrazo.
-Daniela, sierto? -ella asintió con una inocente sonrisa y algo de pena-. Que gusto volverte a ver, hija! -le dió un abrazo-. Seguro que te divertiras con nosotros. Mi hijo me mandó una carta diciendome que estaras con nosotros estas fechas.
-Si, espero no causar muchas molestias...
-Por supuesto que no!... Espera llegar a casa, mi esposa esta muy emocionada por conocerte!
Ella le sonrió.
-Eso no significa nada bueno para mi -le susurró Blake-. Ya me imaginó lo que te contará de mi.
Daniela rió por lo bajito.
El viaje hacia Grodric´s Hollow fue de lo mas tranquilo y corto para Blake. No habian conversado nada en todo el trayecto, pero el silencio junto a ella se hacia muy gratificante. Las palabras sobraban si podian verse a los ojos.
-¡Cariño! Por fin has llegado! -dijo con suma alegria la madre de Blake, en cuanto los vió entrar. Lo abrazó fuertemente y despues lo tomo con ambas manos de la cara y le dió un beso en cada mejilla.
-Me da mucho gusto volver a verte, mamá -le sonrió.
-Y esta linda señorita a de ser Daniela Finnigan, no es asi? -dijo mirandola con una gran sonrisa y dandole un abrazo.
-Si, señora Diggory -contestó con mucho respeto y sonriendole timidamente.
-Valla que mi hijo tiene muy buen gusto. Eres preciosa!
-Je, gracias -se sonrojo un poco.
-Mamá. -dijo Blake algo incomodo y miró a Daniela como diciendole >te lo dije<.
-Dejalos que suban a sus habitaciones, mujer -el padre del muchacho acababa de entrar con las maletas de Daniela y Blake-. Han de estar agotados.
-Si, de hecho -se adelantó Blake antes de que su madre pudiera decir algo mas-. Le enseñaré su habitacion...
-Tienen hambre? -les preguntó la señora Diggory en cuanto ellos iban subiendo las escaleras. Blake miró de reojo a Daniela como pidiendole su respuesta y ella lo miró en sinonimo de un "no".
-No. Gracias, comeremos mas tarde.
La tomó de la mano y subieron las escaleras a toda prisa. En cuanto estubieron a salvo de los oidos de sus padres, Blake la miró detenidamente.
-Que? -preguntó ella.
-Que crees? -le sonrió.
-Que?
-¡Que pasaras conmigo tres semanas enteras! -rió y la cargo por la sintura elebandola y dandole una vuelta, ella comenzó a reir.

-Lo se, no es eso genial? -sonrio. Blake la bajó.
-Balla que lo es! -la tomó nuevamente de la mano-. Ven, esta será tu habitacion, esta a un lado de la mia, haci que...
-Alex -lo detubó tomando sus entrelazadas manos con la otra-. Yo se que habitacion quiero aunque jamas haya visto tu casa.
La miró con curiosidad.
-Si? ¿Cual?
-La que sea qué es tuya -sonrió.
Blake no entedia muy bien y la miró con confucion.
-Mmm, haber. En español, porfavor...
-Jaja, me refiero a que, yo quiero estar contigo las tres semanas COMPLETAS. No quiero que haiga ni un momento en el que no este donde tu estes, asi que tendras que dejarme un sofa libre, para dormir en él.
Blake sonrió ampliamente.
-Pero... tendremos que dejar tus cosas en la otra habitacion, porque si mis padres se enteran, no creo que piensen que solo estamos platicando -ambos rieron.
-Lo se... pero solo te aviso desde ahorita.
Blake la abrazó.
-Creeme es el "aviso" mas genial que me has dado en toda tu vida...
Entraron en la habitacion que supestamente era de ella. Dejaron su maleta sobre la cama y salieron nuevamente hacia la habitacion que ahora seria para ambos.
-Wow! Enserio este es tu cuarto? -dijo Daniela al entrar.
Blake sonrió y comenzó a sacar todo de su maleta.
-Si, esta algo desordenado, perdona.
-Desordenado, dices? Nada que ver! Si vieras la mia. No puedes caminar sin toparte con ropa por la alfombra...
Se rió de lo que ella misma dijo. Miraba con mucho interes cada rincon de la habitacion. Pasó del baño al closet donde se detubo a mirar cada una de las camisas del muchacho.
-Me gusta esta -dijo sacando una color gris, de manga larga y botones; muy formal. La desprendió del gancho en el que estaba y fue hacia Blake-. Pontela, si?
-Ahorita? -lebantó una seja y rió.
-Si. Porfavor, porfavor, porfavor...
-Esta bien, esta bien -tomó la camisa-. Pero no entiendo cual es la impaciencia...
-Quiero verte con ella puesta, es todo. Sé que te veras aun mas guapo...
-Ja! Hazmela buena. Pero bueno, todo lo que mi princesa quiera se le cumplirá -le sonrió.
Se quitó la playera blanca que traia y comenzó a desbotonar la otra. Daniela no le quitaba la mirada de ensima. Blake comenzaba a sentirse apenado.
-No me mires -rió sonrojado.
-Lo siento, esque... jamas te habia visto asi de... cerca.
Se rió.
El chico se dió mas prisa y se puso la camisa lo mas rapido que pudo.
Daniela lo miró de arriba a abajo y se acercó a él un poco mas. Le sonrió y comenzó a abotonarsela.

-Lo sabia -dijo acomodando el cuello.
-Que sabias?
-Que te verias muy bien con ella puesta -le sonrió.
-Eso crees? Entonces jamas me la quitaré -la miró devolviendole la sonrisa.
-Solo no dejes de bañarte -rió con mas ganas.
-Ja ja -sarcastico-. Sabes que?
-Que?
-Ahora yo quiero verte con ella puesta.
-Estas jugando, verdad?
-Claro que no -la miró finjiendo seriedad, pero tratando muy duro de no reir.
Se la quitó mas rapido de lo que se la puso y se la entrego a Daniela. Ella no hizo ningun movimiento despues de tomarla.
-Que esperas? -la apresuró Blake.
-Pues no creeas que me quitaré la blusa que traigo frente a ti -rió.
-Sierto, perdon... -se volteó-. Ya?
-Nop...
-Ahora?
-Nou..
- Y ahora?
-Mmm, sip...
La miró al volterse y ella lebanto los hombros como un: >que tal lusco?<
-Preciosa -dijo casi sin palabras...
-Si como no.
-En verdad. Te vez... te vez, bueno un poco mas chaparrita por lo largo que te queda pero... au! -la chica le dió un golpe flojo en el brazo- Eso me lo tendre que cobrar...
-A si? -le dijo retorica-. Y como? ah?
-Mmm -pensativo mirando hacia el techo- con muchos, muchos, muchos besos! -la hizo caer a la cama de repente y la beso por la mejilla, frente y luego le dió un beso corto en los labios. Ella no paraba de reir.
-Me tomaste desprevenida. No es justo!
-No importa. Aunque te hubiese avisado, te hubiera dado esos besos...
-Muy seguro? -rió-. Que tal si no me hubiese dejado?
-Yo se que si...
-Si tu dices...
-Ah no? -la miró divertido-. No? eh? No?
Le empezó a hacer cosquillas.
-Basta, basta! -reia a mas no poder.
Blake se detubó y su risa pasó a convertirse en una tierna sonrisa. Daniela se la debolvió.
-Te amo -la miró.
Sabia y no esperaba ninguna respuesta a eso que acababa de decir, pero su corazon se aceleró al escucharla contestar:
-Yo tambien
-De verdad? -la miró con alegria.
-Si. Te amo, demasiado...